La final de la Copa Nacional de Selecciones OFI, disputada entre San José y Lavalleja, se vio empañada por un episodio de violencia que estalló tras el gol de penal de Matías Antúnez. El estadio Casto Martínez Laguarda se convirtió en el escenario de una batalla campal que dejó como resultado a siete personas involucradas citadas a declarar ante la justicia.
Este miércoles, el sistema judicial dictó condenas para seis de los implicados, mientras que el séptimo deberá cumplir con prisión domiciliaria nocturna. Los seis condenados enfrentarán una pena de seis meses de prisión, la cual ha sido sustituida por un régimen de libertad a prueba. Durante este período, estarán bajo el control de la Dirección Nacional de Medio Ambiente (DINAMA), deberán presentarse semanalmente en la seccional correspondiente y cumplir con dos horas semanales de servicio comunitario.
Además, se les ha prohibido asistir a cualquier tipo de espectáculo deportivo durante un período de cinco años. La Dirección Nacional de Migraciones será la encargada de asegurar el cierre de fronteras para estos individuos durante la duración de su pena. En cuanto al séptimo implicado, su arresto domiciliario se aplicará desde las 22:00 hasta las 06:00 horas, extendiéndose esta medida hasta junio de 2026.
Este incidente subraya la necesidad de reforzar las medidas de seguridad y prevención en eventos deportivos para evitar que la violencia empañe el espíritu del deporte.

