Como son ya miles los casos de viruela del mono en África, varios países, entre ellos Uruguay monitorean la situación y van adoptando medidas para evitar que la enfermedad llegue a los mismos. La enfermedad se descubrió en 1958 y unos 75 países en el mundo tienen al menos un caso. La sensibilidad especial se da en todos lados ya que apenas salimos de la pandemia del Covid-19 que afectó a 566 millones de personas en todo el mundo y que nos dejó una concientización de la importancia de la prevención ante este tipo de situaciones.
Hay diferencias con el Covid-19. La vacuna contra la viruela del mono se ha desarrollado desde hace muchos años, es la Jynneos del laboratorio Bavarian Nordic, de virus vivo y modificado de la viruela común de Ankara, en cambio en las vacunas del Covid-19 los científicos las desarrollaron en tiempo récord y con estudios nuevos.
El gobierno, con la experiencia exitosa desplegada en la pandemia del Covid-19, sigue de cerca esta emergencia internacional, como la ha declarado la OMS, diseñando las acciones en materia de preparación, planificación, disponibilidad de vacunas, vacunación a población en situación de riesgo, comunicación de riesgos, controles sanitarios y otras respuestas a la misma, tomando en cuenta las enseñanzas políticas y sociales derivadas de aquélla referidas al confinamiento, la libertad responsable, el deterioro económico planificado y asumido y las fortalezas y debilidades del sistema político institucional frente a estos hechos.
La única vacuna existente contra la viruela del mono la fabrica un sólo laboratorio, la farmacéutica danesa Bavarian Nordic pero ya hay desarrollos de vacunas con ARN mensajero más fáciles de producir y para aumentar el stock necesario dado que el virus se difunde a una velocidad alarmante en África y la necesidad de la comunidad internacional de ayudar a este continente en la lucha para contener el virus. En Suecia se declaró el primer caso fuera de África. En lo que va del año causó la muerte de 548 personas en la República Democrática del Congo, donde hay un contingente de 800 efectivos militares uruguayos en dicho país en misión de paz de la ONU.