En Uruguay, como en Israel y en otros países del mundo, las comunidades judías manifestaron con la consigna «Por la Paz y Contra el Terrorismo», con motivo de cumplirse, el 7 de octubre, un año del ataque, sangriento y sorpresivo, perpetrado por el grupo armado palestino Hezbolá, que gobierna Gaza y es apoyado por Irán, contra Israel, que dejó un saldo de 1206 muertos, la mayoría civiles israelíes y de otros países, así como 251 personas secuestradas y llevadas para Gaza, 97 siguen retenidas, de las cuales 34 han sido declaradas muertas y que desató, ese mismo día, la guerra en Oriente próximo, que aún se libra. Ese monstruoso ataque contra el pueblo judío, es el peor de la historia desde el Holocausto perpetrado por los nazis durante la Segunda Guerra mundial.
En Montevideo, la comunidad judía local organizó, en plaza Trouville, una ceremonia recordatoria del ataque terrorista a Israel y el comienzo de la guerra, que contó con la presencia del Presidente Luis Lacalle Pou.
La Embajadora de Israel ante nuestro país, Michal Hershkovitz, expresó que Israel está en una guerra que se ha vuelto multifrontal, enfrentando ataques de distintos frentes» y enumeró los ataques de Hamás desde Gaza, desde el Líbano por Hezbolá, desde Yemen por los rebeldes hutíes y desde Therán, por dos veces, por el régimen iraní, que financia, entrena y arma a todos los grupos terroristas contra Israel y concluyó: «el día en que Irán decida no luchar más, la guerra termina».
Por otro lado, la escalada del conflicto ha tenido diversos efectos mundiales, como por ejemplo, el aumento del precio del petróleo, que aún está lejos de sus máximos anuales y que se ha compensado con las bajas de setiembre y los temores de una vuelta de la inflación y de la frenada de la baja de los intereses de referencia de la Reserva Federal, pero que puede agravarse si Israel, en represalia a Irán, ataca sus instalaciones petroleras y si Irán cierra, en el Mar Rojo, el estrecho de Ormúz, con un bloqueo, truncando el comercio mundial que en alto porcentaje circula por esa ruta marítima.
La guerra está lejos de terminar.