El diputado colorado Felipe Schipani comentó que con el pedido de renuncia, Orsi “se recibió de presidente”.
El martes 15, cuando el programa radial La Pecera informó que Cairo no tenía regularizado el predio donde reside en Pajas Blancas y pagaba el impuesto a la Contribución como si fuera un terreno baldío, además de no haber abonado durante dos décadas el impuesto a Primaria, la intención del presidente era que continuara al frente del ministerio.
Cecilia Cairo, exministra de Vivienda y actual legisladora del Frente Amplio, rápidamente salió a reconocer públicamente su error y expresó su intención de regularizar la situación y pagar lo adeudado, sin intención de renunciar. Según fuentes del gobierno, esto llevó a Orsi a considerar que Cairo había cometido un error, pero no lo suficiente como para solicitar su renuncia.
El presidente se comunicó con Cairo ese mismo día para conocer de primera mano la situación y, tras escucharla, ratificó su postura de mantenerla en el cargo. Alejandro Sánchez, secretario de Presidencia y figura destacada del sector de Cairo, compartía esta posición, que también fue unánime entre los dirigentes del MPP.
Sin embargo, con el paso de las horas, las críticas comenzaron a surgir. Primero, de legisladores de la oposición, que adelantaron que citarían a Cairo al Parlamento. Luego, de dirigentes frentistas de otros sectores, principalmente del Partido Socialista. La situación escaló, y las bases del Frente Amplio de Montevideo adelantaron una reunión para tratar el tema, viéndolo como un “problema serio” tanto para el gobierno como para la fuerza política.
A pesar del respaldo inicial del MPP, la presión sobre Cairo fue en aumento. Orsi, desde la estancia presidencial de Anchorena, analizó el escenario político y, el jueves 17, decidió pedirle la renuncia. Las fuentes indican que Orsi concluyó que Cairo había quedado en “debilidad política” a poco de iniciar el mandato, lo que podría ser un tema recurrente durante el período.
Dado que el Frente Amplio no tiene mayoría en la Cámara de Representantes, se estimó que Cairo podría enfrentar una interpelación y situaciones complejas en el Parlamento. Además, se anunciaron investigaciones por parte de organismos como la Intendencia de Montevideo y el Banco de Previsión Social para determinar sus deudas.
Aunque estos temas seguirán en la agenda pública y la oposición los vigilará de cerca, el gobierno consideró que su nuevo rol como diputada alivia la presión sobre el Poder Ejecutivo. Tras la llamada de Orsi, Cairo, que días antes había afirmado que no renunciaría, decidió dar un paso al costado. El viernes 19, envió formalmente su carta de renuncia a Presidencia.
Este caso deja las siguientes interrogantes a nivel político ¿Le pidieron que renunciara por la falta que había cometido o por el precio político que podría tener? ¿ Realmente el presidente demostró su liderazgo o todo lo contrario? Todavía es muy pronto para conocer las verdaderas dimensiones de todo este episodio, pero seguramente seguirá habiendo coletazos en los próximos días.