En un comunicado del grupo militar Hezbolá, se confirmó que su principal lider, Hasán Nasralá (64), murió en el bombardeo que hizo el ejército de Israel en el sur del Líbano, desde donde atacaban, respaldados por el régimen chii de Irán, con drones y misiles, a la población del norte de Israel, que debió ser evacuada de la zona.
Israel, que no ha reconocido la autoría del hecho, como tampoco EEUU, que ha manifestado que ni siquiera fue avisado con antelación, usó aviones para lanzar bombas sobre el comando militar general de Hezbolá, que se encontraba en el subsuelo de un complejo edilicio en el sur del Líbano, donde estaba reunido Nasralá con sus jerarquías más cercanas. Fuentes israelíes ya habían confirmado la muerte del lider del grupo que Israel considera terrorista.
La preocupación es que con este trascendente hecho el conflicto vaya a escalar. Israel ha mandado mensajes a la otra potencia árabe, la monarquía sunnita de Arabia Saudita, para firmar un acuerdo de reconocimiento, paz y prosperidad, al igual que ya lo han hecho con el Pacto de Abraham, países como Emiratos Árabes Unidos, Marruecos, Baréin y antes Egipto y Jordania.