En estos momentos hay cuatro cables de internet, de un total de 15, que pasan por el Mar Rojo, que están cortados y por ello está afectado el servicio de internet de la zona, que representa un 25% del tráfico mundial.
La empresa de Hong Kong que gestiona los mismos ha desplegado un plan de diversificación del tráfico en distintas vías para solucionar el problema momentáneamente.
Se sospecha que los cables se habrían cortado por una operación de sabotaje de los rebeldes hutíes del Yemen que intervienen contra Israel por el conflicto en la Franja de Gaza afectando la navegación en esa parte crucial del mundo.
La red mundial de cables submarinos es de más de 400 sistemas y de 1 millón y medio de kilómetros de cables en los fondos marítimos y totalizan el 99% del tráfico mundial de datos digitales incluido internet.
Casi el 15% del tráfico asiático de internet se ha visto afectado por estos cortes.
Hay temor mundial a que los boicot contra las redes de cables se produzcan en otras partes del mundo, afectando sensiblemente la vida de la gente y el funcionamiento de sectores sensibles de la economía y la seguridad de los países.
