Jorge Fossati 1 vs Marcelo Bielsa 0. La celeste perdió con el último en las Eliminatorias.

La Selección Uruguaya de Fútbol, entre la noche del viernes y la madrugada de este sábado, jugó su peor partido desde que lo dirige Marcelo Bielsa (van tres partidos sin convertir goles) y perdió con Perú 0 a 1, que iba último en la tabla de las Eliminatorias para el Mundial de EEUU.

La Celeste, en esta etapa, con la contratación de Marcelo Bielsa, se ha jugado todo, y a un alto costo, al director técnico de la misma. De este modo ha resultado que el DT es la estrella, el responsable y quien gana los partidos (de hecho a él se le atribuyen los rutilantes triunfos contra Brasil y Argentina) y las derrotas y empates y eliminación de los certámenes en los que ha participado, llámese Preolímpico, Copa América, etc.

Con Bielsa los jugadores son secundarios, en general ni los menciona en sus reportajes y no se compromete con ninguno, por más destacado que sea. El hace los planteos tácticos a su exclusivo criterio, rotando jugadores, probando otros y cambiándolos de sus puestos habituales. Todo es a su entera responsabilidad.

Por ello se ha dicho que el partido no lo perdieron los jugadores sino que lo perdió el director técnico y se lo ganó el DT de Perú, el uruguayo Jorge Fossati y en todos los aspectos, mental, física y tácticamente, porque hizo todo mejor y  sacó de las tinieblas a un plantel peruano que no conocía la victoria desde hacía mucho tiempo.

Bielsa está bajo cuestionamiento. Se cree, y él lo dijo, que las declaraciones de Suárez, que crearon una grieta  en la opinión a todo nivel respecto del seleccionado, no influyó para nada en este resultado.

No obstante, el próximo martes, en otra fecha por las eliminatorias mundialistas, la celeste jugará contra Ecuador, en Montevideo, con Marcelo Bielsa con el crédito menguado, pero que tiene la chance de recuperarse y obtener una victoria. De lo contrario, comenzará a estar sobre la mesa su alejamiento por decisión propia  o por la de las autoridades de la Auf, aunque esta última posibilidad tiene, para concretarse, un altísimo costo económico.